Se nombró nuevo obispo para Arkansas

El Padre Anthony Basil Taylor, sacerdote que habla español con fluidez de la Arquidiócesis de Oklahoma City, ha sido nombrado el séptimo obispo de la Diócesis de Little Rock.
El Obispo-electo Taylor, de 53 años, fue introducido a la prensa y al personal diocesano durante una conferencia de prensa el 10 de abril en la Capilla de Morris Hall en el Centro Católico San Juan en Little Rock. Lo acompañaban el Arzobispo Eusebius J. Beltran de Oklahoma City, quien hizo la introducción, y Mons. J. Gaston Hebert, administrador diocesano.
El Obispo-electo Taylor admitió que se sorprendió del llamado que recibió el 18 de marzo durante Semana Santa del Arzobispo Pietro Sambi, nuncio apostólico de los Estados Unidos, informándole acerca del nombramiento del Papa Benedicto XVI.
“Me quede asombrado y mudo”, dijo él. “Escuché las palabras, pero al principio no capté. Nada podía estar más lejos de mi mente y mis primeras palabras fueron. ¡Hay Dios mío! Fue una de esas experiencias en la que toda mi vida pasó frente a mis ojos”.
Él formalmente se hará cargo de la Diócesis de Little Rock el 4 de junio a las 7 p.m. en un servicio de vigilia en la Iglesia de Cristo Rey en Little Rock y el 5 de junio durante su Misa de ordenación e instalación a las 2 p.m. en el Statehouse Convention Center (Centro de Convenciones) de Little Rock.
El final a una espera de casi dos años fue una gran noticia para Mons. Hebert, quien ha guiado la diócesis desde que el Obispo J. Peter Sartain se fue en junio del 2006.
“El Obispo Taylor está hecho por Dios a la medida para nuestra Diócesis”, dijo él, refiriéndose a su fluidez en español, su experiencia con los asuntos clérigos, formación del diaconado y su educación en los estudios de las Escrituras.
El Padre Taylor nació el 24 de abril de 1954 en Fort Worth, Texas, él es el mayor de siete hijos nacidos de Basil y Rachel (Roth) Taylor.
El fue ordenado sacerdote el 2 de agosto de 1980 en su misma parroquia, Santa María en Ponca City, Oklahoma. El énfasis del ministerio del Obispo-electo Taylor desde que se ordenó, es el de servir entre los católicos que son hispanos. Su primera asignación fue en la Parroquia del Sagrado Corazón en Oklahoma City, desde donde inició Misas en español en Clinton y Hinton, Oklahoma. De 1982-1986 sirvió en la misión La Reina de todos los Santos en Sayre, lo cual incluía ministerio a la población Hispana en un área de cinco condados.
El Obispo-electo Taylor fue el padre fundador en 1993 de la Parroquia de Santa Mónica en Edmond, Oklahoma, donde sirvió por 10 años. En el 2003 regresó a la Parroquia del Sagrado Corazón, la cual había sido su primera asignación como sacerdote, donde supervisó la última etapa de la transición de una comunidad anglosajona a una predominantemente comunidad católica hispana. Siete de sus nueve Misas son en español, una es bilingüe y una es en inglés.
La Arquidiócesis de Oklahoma City patrocinó y suministró personal a la Parroquia de Santiago Atitlán, Guatemala, de 1963 a 2001. En 1981 el Padre Stanley Rother, un sacerdote de Oklahoma, fue martirizado allá. Después que la Diócesis local de Solola se encargó del cuidado de la parroquia en 2001, católicos de Oklahoma continuaron suministrando asistencia a la parroquia, a la escuela, al hospital local y a un centro de tratamiento de abuso de alcohol que estaba planeado, desde 2005 bajo la dirección del Obispo-electo Taylor. En septiembre de 2007 la causa de canonización del Padre Rother fue formalmente abierta por el Obispo-electo Taylor, quien sirve como delegado episcopal para este proceso.